A veces pienso que a medida que yo pierdo memoria... él la va ganando. Siento miedo de esa rigidez... ¿será que no piensa volver a latir?... Echo de menos nuestras discusiones o tener que apretarlo contra el pecho para que no se escape... pero inevitablemente... hay cosas que no se eligen...
No hay comentarios:
Publicar un comentario